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Buscando (y encontrando) emociones

  • Jeune Sunshine
  • 22 ago 2017
  • 8 Min. de lectura

Tras un tiempo sin poder escribir una entrada de blog en condiciones os revelaré el motivo, bueno solo uno de ellos y reciente. Ando haciendo malabarismos con el tiempo que tengo pues ha llegado el verano, vivo en una ciudad costera por lo que familiares, amigos, etc vienen a pasar unos días, a tomar algo, a pasar sus vacaciones... y yo no tengo vacaciones. Porque en España los autónomos no tenemos derecho a menos q nos vaya muy pero q muy bien económicamente, y no es el caso.

En el proceso de crecimiento personal y descubrimiento he hecho varias amistades, he visitado eventos, compartido vivencias y risas pero había algo para lo que sentía que no iba a estar preparada o no iba a saber reaccionar y se trata de conocer a alguien especial, una nueva pareja, alguien en quien confiar y que despertara sentimientos en mi. Como en alguna entrada ya comentamos, mi caso personal es haber vivido mas de una década con una pareja seria hasta descubrir que no íbamos en la misma dirección, ya no existían los mismos sentimientos, de hecho se transformaron en algo muy diferente. Los últimos años de relación fueron muy tortuosos, muy dañinos personalmente y la salida de "la espiral" fue muy difícil. Por lo que tras salir de ella todo era diferente y ademas había perdido amistades, confianza en mi misma y mucha desconfianza en todo ser humano.

Me costaba conocer gente en forma general, no sentía ser yo misma, ni apreciaba demasiado mis puntos fuertes. Pero no desistí, iba a aprender de nuevo, a enfrentarme a situaciones que deseaba aunque me pusieran nerviosa y volver a ser yo, y fue bastante bien. Intercalando momentos de calma y análisis personal, disfrute de mi tiempo libre pude ir dando pequeños pasos, pasos medianos... Gracias a nuevos hobbies, personas en mi vida y actitudes individuales mías, me he sentido más fuerte, positiva, incluso he podido expresarme más de lo que suelo expresarme (que es bien poco, debido a esa falta de confianza tanto en mi misma como en conocidos) y animar a otras personas a unirse en el crecimiento personal en momentos más bajos. Lo que no llegaba a conseguir como ya dije era conocer a alguien "especial" y con ello digo alguien a quien quisiera acercarme con alguna intención mayor a la amistad. Probablemente estéis pensando en q tras acabar una relación tan larga, es normal que no quisiera acercarme a nadie más, pues cada uno es como es y hasta que no se reparen los daños, muchos no podemos reactivar ese tipo de sentimientos. Y por ese motivo no me ha llegado a obsesionar en ningún momento, aprender facetas de mi misma y saber que deseo en mi vida y cómo lo deseo, quiero avanzar para conseguirlo. Qué necesito en cada momento para aceptarme y quererme, que es lo principal para poder querer a otra persona contigo.

Cada uno tiene su situación personal y no es esta en la que iba a indagar aunque probablemente seria algo que podría compartir más adelante con más detalle, al menos la forma en la que traté de avanzar en una situación muy mala, pues muchos necesitamos o hemos necesitado saber q no estamos solos y que estar "bien" o aprender a estarlo, es cuestión de tiempo y esfuerzo, un esfuerzo que merece mucho la pena cuando pasa la peor parte, os lo aseguro. Una vez pasados varios meses comenzó la curiosidad por conocer a alguien de forma más personal , alguien que me interesara de verdad y me aportara nuevos momentos positivos. Aunque también veía los problemas: nuevas situaciones que aprender a manejar de nuevo, distinguir lo que quiero y lo que no, saber expresarlo y entender las reacciones de los demás, así como encontrar mucho "farsante" y lo peor, la posibilidad de volver a "chocarme" y hacerme daño. Rendirse es algo que no me describe, en cualquier faceta en que lo pensemos, no me gusta rendirme, suelo repetir y repetir lo que me sale mal o no consigo dominar hasta que salga bien, y se vuelva automático, hasta que aprenda a manejarlo y sentirme bien sin dañar a nadie. Por lo tanto, sabía que conocer a alguien con tantas cosas que arreglar iba a ser peligroso, pero también emocionante. Las dificultades no tardaron en aparecer. Mis amistades, al menos con las que más salgo, suelen salir en ambientes de fiesta o que previamente conocen como "zonas de ligue", pero el tráfico de personas habitual allí no es para nada de mi gusto, no es nada que no supiera, ni quiere decir que absolutamente todo el que va, sea un prototipo vacío, pero es difícil distinguir nada ahi, suele ser un "coto de caza" en el que quien se atreve a acercarse solo busca las mismas cosas y con gran probabilidad no coincide con mis gustos, pues partiendo de cero, estoy en un lugar que no suelo frecuentar, donde no m gusta la música ni el postureo...

Pero si me gustan mis amigas, me gustan las risas, las conversaciones, copas, anécdotas... pero yo no voy a irme a casa con nadie de allí que no sean mis chicas, y lo se. Enfrentamos infinidad de cosas divertidas y otras no tan divertidas, algunas las habéis podido leer en alguna entrada. En resumen mi fe por conocer a alguien que me interesara y me llenara personalmente, disminuía. Y yo me apoyaba más en mi resistencia y paciencia. ¿Qué más da? No tengo prisa, sino tiempo para seguir aprendiendo. No tardaron en aparecer los consejos de los demás: apúntate a un curso, un viaje, una web de citas... mil maneras de conocer gente, pero como ya comenté hablando de la amistad, las cosas ya no son tan fáciles como antes, no vale con acercarte a alguien y decirle "¿quieres que seamos amigos?" Ese tiempo pasó. Pero este también es emocionante. E hice caso, me apunté a cosas que me interesaban y de paso rellenaba un poco más de curriculum, eso siempre viene bien y pasara lo que pasara, iba a conseguir algo positivo tras aquello. Si me habitúo a situaciones sociales que me costaban, ya eran más llevaderas, incluso algunas las disfrutaba (y disfruto aun) mucho. También me anote a algunas webs de citas, pero muchas se basan exclusivamente en la foto, conseguí conocer a algunas personas, hablar o expresarme, incluso quedar. Pero ningún sentimiento se despertaba, en absoluto. Dejo aparte la mayoría de los usuarios cuya finalidad es: el sexo. Sin mas. Ojo, no lo condeno, no lo veo mal en absoluto, cada uno busca lo que quiere y es respetable, el sexo es una faceta más de la vida a la que solo le ponemos tabúes sin sentido.

Con este "problema", refiero a los qué buscan sexo pero se empeñan en camuflarlo como algo más, haciéndome ver que creen que soy imbecil y me pueden convencer de llegar a una relación física que no deseo si "marean la perdiz" lo suficiente y creedme, el 90% ni siquiera sabían lo que es la sutilidad o el significado de la palabra. Ya digo que apoyo 100% la búsqueda de relaciones físicas sin nada mas si es lo que deseas, pero quiero que me aportes el mismo apoyo a mi por desear algo más. No soy mejor que tu, ja! Para empezar me ganas en confianza personal, pero para mi eso va conectado algún sentimiento y no hablo del amor, que por supuesto si lo considero la finalidad, pero solo que despierte interés, confianza y seguridad, saber que no es lo único que nos interesa, solo una faceta más de conocernos, y puede que la más divertida. Muy cierto es que muchísimas de estas personas que encontré, tras una pequeña conversación de conocimiento e intenciones me han hablado con claridad y han recibido lo mismo por mi parte, terminando en una despedida cordial, deseo de suerte en el futuro y cada uno a continuar su aventura. Me parece una respuesta más que digna, sino cumplo tus deseos ni tu los míos, te respeto enormemente por tu sinceridad y no nos hacemos perder el tiempo. Si además hay paginas de contactos que llegan a esta finalidad en concreto, es verdad que es menos frecuentado por chicas porque como norma general, necesitamos algo más para sentir la confianza que te hace disfrutar de verdad de una relación sexual pero solo es una norma general así que esta para saltársela, conozco tanto chicas como chicos en estas páginas porque así lo desean y me encanta su seguridad y sinceridad con ellos mismos. De sobra está decir que se lo pasan de vicio. Volviendo al tema tras todas estas experiencias personales y online, no conseguía sentir absolutamente nada por nadie en ese sentido. En el momento en que se notaba una intención más allá de la amistad, mi cuerpo no sentía nada y mi mente me decía que me fuera casa a hacer algo de provecho.

No voy a mentir, si que he tenido conexión, en un caso intelectual, pero no física, en otro momento física pero no mental, otras tenia visiones de las cosas tan dispares que con 5 min de conversación ya era mas que suficiente... podría hacer otra entrada sobre algunas de estas situaciones y quizá las de algunos amigos y conocidos que seguro os da para aprender algo nuevo, sorprenderos o al menos echaros unas risas. En todo caso digo que si he tenido citas e incluso alguna relación física, (con catastrófico resultado, pero ese es otro tema) digamos que "lo he estado intentando" pero en cuanto noto que no hay conexión real, prefiero dejarlo claro y seguir mi vida sola, que se está muy muy bien, la verdad. No supe durante mucho lo que era y aunque si que aburre o frustra a veces, se disfruta muchísimo la independencia, es algo fascinante y necesario. Pero un día lleno de casualidades dispares todo puede cambiar, y cuando pensaba que no merecía la pena seguir buscando al menos por el momento, pues no me sentía ya igual de preparada para más "disgustos". Llega una sorpresa, despacio, sigilosamente pero con fuerza. En principio quedo clara la intención y la velocidad a la que quería tomarme las cosas, a lo que no surgió ningún problema, más bien fue recibido con satisfacción. A pesar de ello en unos días de conversación todo parecía sobre ruedas, la comodidad no tardo en hacerse paso y con ello, la sinceridad desenfadada. Conocerse en persona y quedar varias veces para charlar cara a cara, cuando quise darme cuenta estaba pensando en el hueco que podría ocupar en mi vida. Tras los primeros besos se colaba en mi mente y me hacia sentir especial y feliz cuando podíamos vernos.

En un mes sin darme cuenta se ha colado por completo en mi vida y solo deseo conocernos más y más cada día. Han surgido los primeros miedos, roces e incluso pequeñísimas peleas y todo ha sido arreglando casi de forma natural por completo, recurriendo a la comunicación, lo cual me ha resultado sorprendente y maravilloso. Desde luego parto de la idea de que la comunicación es fundamental, pero también que no es fácil. Para mi depende de la otra persona en gran parte y en cómo me siento junto a ella, especialmente al expresar algo de importancia. Y además de una dificultad personal para expresar mis sentimientos o vivencias personales, cada uno tiene sus singularidades. Esto se ha nublado al conocernos, he dejado que conozca partes de mi que normalmente mantengo ocultas para no sentirme incómoda con los demás aunque no tienen gravedad, pero extrañamente esto me ha llevado a una conexión mucho mayor, quizá por coincidencia (una más) o por ser el momento exacto... podría haber mil razones que se nada importan. Lo que importa es cómo me hace sentir y qué siente el estando conmigo, aunque ahora nos dé miedo en ocasiones, alegría o ilusión, tenemos una clara intención de seguir adelante y hasta las ganas de ir más despacio se van igualmente desvaneciendo y aparecen conversaciones o pensamientos que ambos colocábamos muy adelante en el tiempo, pero que a veces parecen necesidades.

En general me encuentro en un viaje de emociones intensas, buenas y malas que me siento capaz de manejar y sobretodo me siento ilusionada, porque veo el fruto de mi esfuerzo personal y me siento mucho más fuerte, me conozco mucho más y creo que soy muy capaz de compartirlo. Porque perseverar y seguir adelante aceptando mis singularidades me ha llevado a seguir enfrentándome a situaciones, encontrando a alguien tan especial. Dure lo que dure este oleaje de emociones y acabe como acabe (aunque ojalá no termine) sin duda es una historia preciosa que nos está haciendo muy felices, y hay que vivirlo. Ya sabéis el proceso y finalidades del blog y con esto solo quisiera seguir animando a todos aquellos que no se rinden y luchan cada día la eterna batalla de aceptarse, quererse, aprender y saber que somos únicos y singulares y hay un buen porcentaje de mundo como tu. Se acabó la "normalidad" disfruta de quien eres, de tu vida.

Cuídate. ¡Y mucha suerte!

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